La alta toxicidad de los más de 5 billones de colillas que son arrojados cada año al entorno causa una grave contaminación de los suelos, las aguas y los ecosistemas naturales.
Más de 7.000 sustancias químicas tóxicas son potencialmente cancerígenas para el ser humano e impregnan nuestros ecosistemas. Los restos de una colilla son capaces de contaminar hasta 50 litros de agua dulce y 10 litros de agua salada.
A pesar de ser ya el residuo humano más abundante a escala mundial, el gesto de tirar una colilla al suelo es algo habitual, lejos de la magnitud real de irresponsabilidad ambiental. Colillas llegan a cubrir las calles, las playas, flotan en el agua de los ríos o entre los parques: este residuo es el principal contaminante que encontramos en playas y océanos y el segundo más abundante en ríos y embalses.
Tirar al suelo es tirar al mar
Las colillas contaminan océanos tanto como los plásticos, su presencia está por encima de residuos como envoltorios, botellas, tapones y bolsas de plástico. La contaminación no solo se lleva en el agua, también son ingeridas por error por los peces y otros animales.
¿Qué contiene una colilla de cigarro?
- Arsénico
- Nicotina
- Metales pesados
- Hidrocarburos.
- Acetosa de celulosa
En esencia un derivado del petróleo que resulta perjudicial para el medio ambiente. Los filtros contienen hasta 400 sustancias tóxicas y tardan 10 años en degradarse.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) alertó que cada año generamos entre 340 y 680 millones de kilos de residuos procedentes de la industria del tabaco. “Las consecuencias ambientales del consumo de tabaco lo trasladan de ser un problema individual a ser un problema humano”, afirmó en aquel informe Oleg Chestnov, subdirector general de la OMS. “No se trata solo de la vida de los fumadores y de quienes les rodean, o incluso de aquellos involucrados en la producción de tabaco. Lo que ahora está en juego es el destino de un planeta entero”.
Las colillas representan más del 30% del total de los desperdicios que hay en el medio ambiente y el desecho más numeroso del planeta hecho por los humanos. Reptiles, peces y hasta aves mueren envenenados al comer estos desperdicios. Las lombrices, transportan nutrientes a la superficie terrestre y oxigenan la tierra, las colillas pueden llegar a envenenarlas.
En el caso de las plantas donde hay presencia de colillas de cigarro, estas reducen hasta en un tercio el éxito de germinación y las que alcanzan a germinar y crecer lo hacen en forma deficiente. Sus tallos son débiles y el peso de su raíz se reduce casi en un 60%.
Si vas a fumar, por favor no tires las colillas de cigarro a la calle, playa, parques o bosques. Colócalas en contenedores, hay personas que las reciclan.